UNA NUEVA EXPERIENCIA

Los alumnos del Mater Dei visitamos el albergue de Cáritas “Mare de Deu del Lledó”.

Nos dimos cuenta de que hay mas gente que necesita ayuda de la que pensamos y de que nos puede ocurrir cuando menos lo imaginamos.

Tuvimos una experiencia, en la que vimos que hay personas que jamás pensarías que requieren la ayuda de otros.

Nos trasladamos a una sala en la que Julián, el director, nos explicó el verdadero significado de la palabra “ayuda” y para que sirve el centro de acogida.

Un hombre llamado Luís, voluntario del albergue, nos contó su experiencia como ayudante. Lo que más nos impactó fue notarle que ayudando a los demás a cambio de nada aumenta su felicidad. Una de las aptitudes que Luís desempeña es hablar con esa gente y escucharles, así se pueden desahogar de sus problemas.

Algunos tuvimos suerte de poder escuchar la historia de algunas personas que han necesitado un sitio donde refugiarse de la noche a la mañana.

Mas tarde, visitamos las instalaciones del centro (la lavandería, las duchas, los baños, los dormitorios, el ropero…) y pensamos indirectamente lo aseado que estaba todo sabiendo la cantidad de gente que pasa a diario.

A continuación, fuimos guiados por Luís al ropero. En ese lugar nos enseñó la distribución de la ropa y su precio. En ese momento, él nos comentó que la ropa era gratuita; todos nos sorprendimos, pensábamos en como se ganaba el dinero, ya que, el albergue tiene unos gastos. Y es que cuando alguien se lleva alguna prenda, paga lo que puede o en ocasiones lo que quiere.

Después nos explicaron el día a día en el comedor, es impactante el número de personas que pasan a diario por allí en busca de comida, alrededor de 105 personas diarias, aprox. Tuvimos la oportunidad de poder disfrutar ayudando a servir la comida. Había gente muy diferente (distinto país, situaciones, historias…). Muchos de ellos no se esperaban nuestra presencia en ese lugar y por eso hubo gente que a lo mejor se pudo sentir un poco avergonzada por el hecho de no poder pagarse su propia comida y que el comedor les tenga que aportar ese soporte. En cambio, también las hubo que demostraron su agradecimiento con mayor grado que otras. Nosotros fuimos con la mejor intención, sin querer que nadie se molestara.

Para todos nosotros fue una experiencia muy positiva ya que nos ha ayudado a darnos cuenta de muchas cosas que seguramente no hubiéramos dado importancia y que realmente si que la tiene.

Agradecemos al albergue esta oportunidad que nos ha ofrecido. Esperamos que la situación mejore y recomendamos a todas las personas que pasen por el centro y que ayuden en todo lo necesario para así sentirse como nosotros, llenos de satisfacción.

Un saludo muy especial.

Ylenia Marmaneu y Sara Casanova

Alumnas del Colegio Mater Dei, 4º ESO