Que el deporte es bueno para nuestra salud, es algo que todos sabemos. Realizar deporte con regularidad tiene múltiples efectos beneficiosos en nuestro organismo: mejora la circulación sanguinea y linfática, mantiene nuestra musculatura flexible y tonificada, ayuda a controlar el sobrepeso, etc. y además cuando realizamos deporte en nuestro cuerpo se liberan endorfinas, que nos hacen sentir alegres y satisfechos.

Pero además la práctica de los deportes colectivos, como por ejemplo el fútbol o el baloncesto, tienen otros efectos positivos sobre la persona y sobre el grupo, ya que contribuyen a la creación del sentimiento de pertenencia, al aprendizaje del trabajo en equipo y a la formación y afianzamiento de lazos de amistad y compañerismo.

Por todos estos motivos, desde el centro de día, hemos propuesto la realización de deportes colectivos al aire libre dentro de nuestra programación de actividades. Hoy hemos jugado el primer partido de fútbol, y la valoración es muy positiva. Aunque las personas que han participado llevaban mucho tiempo sin realizar deporte, es admirable lo mucho que se han esforzado (mañana tendrán agujetas). Nos hemos reído de lo lindo y todos lo hemos pasado muy bien. Asi que¡sigamos jugando al fútbol!

El jueves pasado en el Centro de Día del Albergue organizamos una salida para disfrutar un poquito de las fiestas de la Magdalena. La idea, en principio, era asistir a una representacion teatral en el Teatro Raval, y hacia allí nos dirigimos. ¡Qué chasco cuando nos dijeron que las entradas estaban agotadas! Tuvimos que  improvisar y decidimos acercarnos a la Feria Alternativa; casualmente llegamos justo cuando iba a dar comienzo un recital poético a cargo del colectivo "Amart", de modo que decidimos asistir.

Durante el rato que duró el recital, pudimos disfrutar de las poesías de diferentes participantes que compartieron con nosotros sus escritos sobre diferentes temas: amor,  crítica social, política, cariño por nuestra tierra, etc.

Me gustó ver como algunas de las personas que nos acompañaban y que en principio tenían  reticencias a escuchar el Recital, sonreían  mientras escuchaban atentamente las poesías...También me gustó charlar tranquilamente y compartir con ellos mientras paseábamos...Pero ¿sabéis qué es lo que más me gustó? lo que más me gustó es verles en la calle, fuera del Albergue, paseando por la feria, mirando los puestos, comentando con los compañeros, haciendo lo que cualquier persona  de Castellón hace en  la Magdalena: salir y disfrutar de las fiestas. Como cualquier persona "normal".