Fiesta de Nochebuena (arriba) y espectáculo de magia (abajo)

En nuestro trabajo desde el centro de acogida temporal de Castellón, en la labor de acompañar a las personas en su día a día, consideramos elemento esencial ayudarles a que participen en las fiestas, en este caso de Navidad.

Por eso durante estos días estamos celebrando todo lo que lleva consigo la Navidad. Comenzamos en la tarde del día 24 (Nochebuena). Tras compartir un chocolate y bizcochos, nuestro voluntario Javi Aguilella, junto con Luis Muñoz y Hector Madueño, nos ofreció uno de sus espectáculos, "Palabras que se dejo el viento", espectáculo de poesía y música que nos ayudó a ir entrando en la fiesta. No falto la visita de Papa Noel, con algunos regalos, y una cena especial, según la ocasión se merecía.

Para seguir con la fiesta, el jueves 26, otros dos voluntarios, Juanjo y Adrián ("Magia a dos"), nos ofrecieron un espectáculo de magia y humor, acompañados de Nieves, que nos deleito con su baile clásico.

Durante estos días están siendo muchas las personas que intentan que, de una forma u otra (desde una donación de alimentos hasta dando su tiempo, colaborando con nosotros), la Navidad sea una fiesta muy especial para estas personas, que carentes de recursos económicos no carecen de ganas de vivir la vida con esperanza y compartir su tiempo con aquellos que estamos junto a ellos en estos momentos. Porque compartir el espacio físico supone algo más, compartir sus sentimientos y ganas de dejar atrás los malos momentos.

El sábado pasado, 21 de diciembre, nos visitó un grupo de jóvenes que se están formando en catequesis de confirmación en la Parroquia San Cristóbal, de Castellón, junto con el P. Recaredo, padres y una catequista. Dos de de estos jóvenes nos cuentan su experiencia:

La experiencia de ir al comedor social nos sirvió para darnos cuenta de que en el mundo hay mucha gente que necesita ayuda y por ello tenemos que abrir los ojos, de forma que podamos ayudar a las personas que necesitan nuestro apoyo para seguir adelante en su día a día a pesar de las dificultades. 

Con esto también nos dimos cuenta de que no todas estas personas tienen el aspecto que nos imaginábamos, son personas normales que por circunstancias de la vida han perdido lo que tenían; trabajo, familia, dinero... y por ello nosotros, tenemos que tratarlos con amor.

¡Ha sido una experiencia inolvidable, que nos servirá a todos para el futuro!

Cristina y Carmen

Pronto llega la Navidad, es tiempo de reflexión, de encuentro y celebración. Por ello, en el albergue hemos querido reunir a todas las personas que colaboran con nosotros, bien sean trabajadoras o voluntarias, para mostrarles nuestro afecto, para agradecerles su trabajo, y para celebrar juntos el nacimiento de Jesús.

Con este motivo, nos reunimos el lunes pasado y celebramos juntos la eucaristía en el mismo comedor del albergue, donde luego compartimos una rica fideuà que hico nuestra compañera Paqui. Gracias a todos y todas por vuestra presencia y ¡Feliz Navidad!